AMAR NO SIGNIFICA TENER, SINO SER
En el mes de octubre de 2016 tuve la
dicha de asistir a cinco matrimonios en la etnia Murui-Muinana que vive a
orillas del río Caquetá. Contrario a lo que piensan muchas personas sobre cómo
podría celebrarse el matrimonio: “tener un
anillo valioso”, “carro de lujo”, “los trajes costosos de la boda” los matrimonios que yo presencié tuvieron nada
de esto. Fueron engalanados por la
bellezas de la Amazonía, las capillas o las malocas donde celebraron las bodas
eran bien decoradas por las comunidades guiadas
por sus catequistas. La tranquilidad marcó dichas celebraciones. Las
parejas entraron en el sitio con los demás
y ocuparon los espacios preparados para ellos y durante la misa
pronunciaron sus promesas de fidelidad matrimonial mutuas